Un afiche de principios de siglo. ¿Del XIX? Nooo, del siglo XXI. Muestra el tratamiento de un conflicto en Clarín manejado por Pedro López Matheu
Por estos días, López Matheu desplegó su talento en Kraft Foods
Daniel Ponzo se define como un hombre “sin filiación partidaria”. Fue delegado de Clarín en 2000, época en que Pedro López Matheu –actual director de Asuntos Corporativos y Gubernamentles de Kraft Foods Cono Sur– era gerente de Asuntos Institucionales del gran diario argentino y trabajaba codo a codo junto a Jorge Figueiras. Ponzo fue también el mentor de “Clarinete”, órgano de difusión pararelo que supo circular por aquellos años.
Hoy, en diálogo con LOS CANICHES DE PERON, Daniel Ponzo señaló que le llaman poderosamente la atención los puntos de contacto que han tenido el desarrollo y el tratamiento por parte de la patronal de los conflictos de Clarín (2000), AGR, empresa gráfica de Clarín (2004) y Kraft Foods (2009), cada unos de los cuales tuvo como cara visible al multifacético Pedro López Matheu en las negociaciones.
“Los mecanismos son los mismos”, apunta Ponzo, y agrega: “El recurrir rápidamente a Gendarmería, todo el tratamiento de la cuestión legal, las prácticas desleales, el no reconocimiento de la comisión interna, las persecuciones, el ocultamiento de los padrones, las filmaciones de las asambleas, el armado de una lista con nombres de personas y sus respectivas fotografías para que la gente de seguridad no los deje entrar, la represión, etc., son calcados”.
“En el año 2000 estaban en Clarín Carlos Quatromano y Jorge Camarata, dos delegados que no aparecían nunca y jugaban claramente para la empresa. Empezó la limpieza, los retiros voluntarios, y ellos no aparecían. Se trabajaba 9 o 12 horas contra convenio, y aún hoy sucede”. Claro que algunos no tienen problemas en trabajar a destajo, : "Marcelo Bonelli, está cobrando alrededor de $100.000 por el diario, la TV y demás servicios, o Tenembaum y Zlotowiazda, que deben andar en 80 mil pesos cada uno”.
El caso es que, ante la ausencia de los delegados, Daniel Ponzo convocó junto a otros compañeros del diario (Ana Ale, Olga Viglieca, Daniel Luna) a una asamblea en 2000, que “reunió a 400 compañeros y logró destituir a estos delegados por asamblea y nombrar una nueva comisión interna”. Ahí comenzaron los problemas: “La empresa no nos daba los padrones, se votó fuera del diario, en la calle, con vigilancia entre la gente, con filmaciones. Todo esto manejado por Pedro López Matheu. Votaron 600 compañeros, el 70% de los trabajadores. La empresa, por supuesto, no reconoció a esa comisión interna. En noviembre de 2000, Clarín despidió a 113 trabajadores, entre ellos a todos los miembros de la comisión interna”.
Ya en los años 90 había sucedido lo mismo con Pablo Llonto (autor del recientemente publicado “La Noble Ernestina” y abogado querellante de David Lanouscou por el caso de apropiación ilícita de hijos de desaparecidos en la última dictadura), que terminó siendo despedido por Clarín, y cuyo reclamo llegó hasta el Tribunal de La Haya.
“La estrategia de no reconocer a la comisión interna fue exactamente la misma en este caso y en el de Kraft”, apunta Ponzo. “Aplicaron las mismas prácticas: echar a un gran grupo de gente por considerarlo ‘simpatizante’ de la comisión interna, armar los despidos y luego negociar. El objetivo es voltear a la interna y a los activistas, y de paso sacarse de encima a los que están en edad jubilatoria, a los que acumulan muchos partes de enfermo, etc.”
Lo mismo sucedió en 2004 en Artes Gráficas Rioplatenses (AGR), la empresa gráfica del grupo Clarín encargada de la impresión de, entre otras, las revistas Viva, Genios y La Guia de los Chicos, y cuyo conflicto gremial “también estuvo manejado por López Matheu”. El grupo despidió a 119 trabajadores de AGR, incluida toda la comisión iterna; luego reincorporó a 48, pero dejó en la calle a los delegados. En este caso, el reclamo de los gráficos llegó hasta la OIT, por violación de personería gremial.
En suma, tres conflictos resueltos del mismo modo y bajo el signo de un mismo “negociador”: el abogado Pedro López Matheu, quien paradójicamente presidió en 2003 la Comisión de Libertad de Expresión de la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA), y cuyo mayor “mérito” fue poner en marcha prácticas persecutorias, ilegales, antisindicales y violatorias de la inmunidad gremial.
Clarín, Kraft, ADEPA, Nueva Ley de Medios: demasiadas coincidencias…
Caniche Pipo
Hoy, en diálogo con LOS CANICHES DE PERON, Daniel Ponzo señaló que le llaman poderosamente la atención los puntos de contacto que han tenido el desarrollo y el tratamiento por parte de la patronal de los conflictos de Clarín (2000), AGR, empresa gráfica de Clarín (2004) y Kraft Foods (2009), cada unos de los cuales tuvo como cara visible al multifacético Pedro López Matheu en las negociaciones.
“Los mecanismos son los mismos”, apunta Ponzo, y agrega: “El recurrir rápidamente a Gendarmería, todo el tratamiento de la cuestión legal, las prácticas desleales, el no reconocimiento de la comisión interna, las persecuciones, el ocultamiento de los padrones, las filmaciones de las asambleas, el armado de una lista con nombres de personas y sus respectivas fotografías para que la gente de seguridad no los deje entrar, la represión, etc., son calcados”.
“En el año 2000 estaban en Clarín Carlos Quatromano y Jorge Camarata, dos delegados que no aparecían nunca y jugaban claramente para la empresa. Empezó la limpieza, los retiros voluntarios, y ellos no aparecían. Se trabajaba 9 o 12 horas contra convenio, y aún hoy sucede”. Claro que algunos no tienen problemas en trabajar a destajo, : "Marcelo Bonelli, está cobrando alrededor de $100.000 por el diario, la TV y demás servicios, o Tenembaum y Zlotowiazda, que deben andar en 80 mil pesos cada uno”.
El caso es que, ante la ausencia de los delegados, Daniel Ponzo convocó junto a otros compañeros del diario (Ana Ale, Olga Viglieca, Daniel Luna) a una asamblea en 2000, que “reunió a 400 compañeros y logró destituir a estos delegados por asamblea y nombrar una nueva comisión interna”. Ahí comenzaron los problemas: “La empresa no nos daba los padrones, se votó fuera del diario, en la calle, con vigilancia entre la gente, con filmaciones. Todo esto manejado por Pedro López Matheu. Votaron 600 compañeros, el 70% de los trabajadores. La empresa, por supuesto, no reconoció a esa comisión interna. En noviembre de 2000, Clarín despidió a 113 trabajadores, entre ellos a todos los miembros de la comisión interna”.
Ya en los años 90 había sucedido lo mismo con Pablo Llonto (autor del recientemente publicado “La Noble Ernestina” y abogado querellante de David Lanouscou por el caso de apropiación ilícita de hijos de desaparecidos en la última dictadura), que terminó siendo despedido por Clarín, y cuyo reclamo llegó hasta el Tribunal de La Haya.
“La estrategia de no reconocer a la comisión interna fue exactamente la misma en este caso y en el de Kraft”, apunta Ponzo. “Aplicaron las mismas prácticas: echar a un gran grupo de gente por considerarlo ‘simpatizante’ de la comisión interna, armar los despidos y luego negociar. El objetivo es voltear a la interna y a los activistas, y de paso sacarse de encima a los que están en edad jubilatoria, a los que acumulan muchos partes de enfermo, etc.”
Lo mismo sucedió en 2004 en Artes Gráficas Rioplatenses (AGR), la empresa gráfica del grupo Clarín encargada de la impresión de, entre otras, las revistas Viva, Genios y La Guia de los Chicos, y cuyo conflicto gremial “también estuvo manejado por López Matheu”. El grupo despidió a 119 trabajadores de AGR, incluida toda la comisión iterna; luego reincorporó a 48, pero dejó en la calle a los delegados. En este caso, el reclamo de los gráficos llegó hasta la OIT, por violación de personería gremial.
En suma, tres conflictos resueltos del mismo modo y bajo el signo de un mismo “negociador”: el abogado Pedro López Matheu, quien paradójicamente presidió en 2003 la Comisión de Libertad de Expresión de la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA), y cuyo mayor “mérito” fue poner en marcha prácticas persecutorias, ilegales, antisindicales y violatorias de la inmunidad gremial.
Clarín, Kraft, ADEPA, Nueva Ley de Medios: demasiadas coincidencias…
Caniche Pipo
Que documento importante, Caniches. Se aclaran muchas cosas.
ResponderBorrarSaludos
Che, un joya el quía.
ResponderBorrarMuy buena cobertura de semejante biografía. Bravo, Pipo.
Abrazo.
los caniches de peron orgullosos de su cronista estresha!
ResponderBorrargrande Pipon. un grito de corazon!
Poniendo los puntos sobre las íes y sacando caretas
ResponderBorrarclarísimo!
Gran trabajo!
muchos saludos
Excelente nota de Pipo Caniche, PIPO SOY TU FAN!
ResponderBorrarMuy bueno, cumpa no podra sacar la foto del rabino verga que me da nauseas cada vez que lo veo. Saludos.
ResponderBorrarA mí no me sorprende, pero tengo una duda ¿Esto significa que se ubican del lado de los trabajadores, para frenar los despidos y defender la Comisión Interna?
ResponderBorrarhttp://www.pcr.org.ar/?id_nota=4616
ResponderBorrarEn este link del PARTIDO COMUNISTA REVOLUCIONARIO se comenta de una reunión en Cañuelas entre Bogado, Bergman Apaolaza, De Angeli y otras joyitas. Es de ANTES de las elecciones. Ojooooo que esto viene de la mano de Clarinete y la soja destituyente!!!
Alejandro
Excelente trabajo caniche Pipo, excelente. Muchísimas gracias, hay que hacerlo circular.
ResponderBorrarSean más claros cuando hablan ¿Que están "probando"?
ResponderBorrarYo cuando supe esto me convencí (si hacía falta) de la necesidad de defender la CI y los delegados de la fábrica.
Si Matheu hizo esto de echar trabajadores y sacarse de encima su organización gremial cuando estaba en Clarin y gobernaba la Alianza (armada y potenciada por Clarin), si lo hizo nuevamente cuando gobernaba Kirchner y eran chanchos amigos con el Grupo Clarin, y hace lo mismo ahora que está en la Kraft (que es de los yanquis, y Clarin no es de los yanquis), yo entiendo que el enemigo es el tipo ese. En realidad sus patrones de turno, pero Kraft y Matheu son la misma cosa. Y entiendo que lo que más les molesta, lo que quieren destruir es la organización de los trabajadores al menos cuandodo esta defiende los intereses de los trabajadores. Entonces la lucha de los obreros de Terrabusi es una lucha también por la libertad sindical (no en el sentido de armar sindicatos paralelos si no en el sentido de que los obreros de cualquier fábrica puedan organizarse sindical y políticamente).
De últim, si el golpe a los trabajadores viene desde Clarin (cosa que yo veo improbable por ser la Kraft un monopolio yanqui) ¿ustedes no era que enfrentaban a Clarin? Bueno, ¿de qué lado están, entonces? Diganlo más claro, no dejen lugar a dudas, porque en este caso las vacialaciones los ubican del lado de la Kraft. El ni yanquis ni marxistas no los convierte en neutrales.
Además, entrando en las teorías conspirativas, si lo que se quiere es pegarle al gobierno, ¿no les parece que sería más productivo tirarle encima con toda la CGT-Azul y Blanca y con las 62? Piensen un poco.
Por último, ¿ustedes conocen al enemigo que dicen estar enfrentando? Me refiero a la SRA y la UIA ¿la conocen? ¿Ustedes piensan realmente que la UIA y todos esos van a arriesgarse a prenderle fuego a la concentración industrial más importante de Argentina, que es la zona norte del GBA? Si piensan eso, no conocen al enemigo que dicen estar enfrentando.
Ustedes pueden buscarle la quinta pata al gato, y hasta pueden encontrarla (todos los gatos tienen 5 patas si hay voluntad), pero deberían decir más claro si van a defender a los obreros de Terrabusi y a su Comisión Interna.
Y tengan cuidado de generar una situación en la que tengan que pedir que defendamos a un gobierno que reculó o fue complice cuando un monopolio yanqui se ensañaba con los trabajadores argentinos.
Estamos de acuerdo en que los trabajadores tengan libertad sindical y política, y como peronistas, en algun lado ya lo pusimos, defendemos a los trabajadores, porque la historia de este mevimiento asi lo dice, fuimos somos y seremos la unica alternativa viable para el movimiento obrero, en lo sindical y en lo político, nosotros pusimos los muertos y los desaparecidos enfrentado a las patronales y a los enemigos del pueblo, a la Sociedad Rural Argentina, a la UIA y a todos los complices de la dictadura genocida. Con respecto a lo del golpe, viene de Clarin y de estas corporaciones, desde el momento que Magnetto, (2do del grupo Clarín) es vicepresidente de AEA (Asociasión Empresaria Argentina), en esta conjuncón juegan tambien otros actores, llámese la cupupla de la igresia católica, los agrogarcas y demas. Nada diferente a lo que fue la Unión Democrátcia que enfrento a Perón, donde se juntaron tanto la derecha como la izquierda, sumado al embajador yanki, en este caso su lugar lo ocupa Kraft, dentro de esta nueva coyuntura. Por eso nosotros tenemos bien claro quien es el enemigo, pero cuidado, también entendemos que hay actores de reparto (ej Vilma Ripoll, Nestor Pitrolla, Raul Castelles) que le son funcionales a este, y muchas veces tan peligrosos para los intereses nacionales y populares. VIVA PERON CARAJO
ResponderBorrarSuscribo plenamente lo que dice el Caniche Julián. ¿Quién dice que el enemigo son los trabajadores de Kraft? Obviamente que el enemigo es López MAtheu, cipayo de Clarin, de Terrabusi y de quien le ponga la tarasca, y seguramente también ortiba y gorila por vocación.
ResponderBorrarLo que se intentó demostrar es que el manejo del conflicto por parte de López Matheu fue calcaldo en los tres casos.
Somos peronistas,estamos del lado de los trabajadores, no tenemos dudas.
Ahora, (m), también cabría preguntarse de qué lado están el PO, el PCR y el MST: ¿del lado de los trabajadores o del lado de los agrogarcas? Si no, explicame que mierda hacian estos muñecos en la marcha del Monumento a los Españoles al lado de De Angeli y Biolcati. Y ahi no hubo quinta pata, sino un claro apoyo a la Sociedad Rural.
Matices va a haber siempre, pero mientras algunos negociaban con los milicos y hoy son funcionales a Biolcati y compañía, el pechito lo ponía y lo sigue poniendo Perón, ¿cabe alguna duda?
Caniche Pipo
Compañero. Hay un solo lado. El del pueblo trabajador. El que eligio Perón. El resto es VERSO. Tengas la camiseta o no, el salario lo defienden los trabajadores, los patrones te garcan siempre, cada vez que pueden. La marcha dice "combatiendo el capital" no es un metáfora, es una verdad peronista. No te gusta Clarín? jajaja Nacionalicen esa fábrica de cucuruchos y alfajores del orto ya. Y despues les dan otra patada en el ortus a Carrefour Disco Coto Repsol La Serenísima, Techint, Loma Negra, Benito Roggio etc etc etc No los necesitamos para nada. Podemos ser absolutamente felices sin ellos
ResponderBorrarCris, no te vas a creer que con Clarín me conformo no? Un abrazo peronista compañeros!!!