“LA CTA EJERCE UNA ESPECIE DE VANDORISMO DE IZQUIERDA” - Entrevista exclusiva con Luis D'Elía (2º Parte)

La formación de cuadros, y más educación
En esta instancia de la velada, las pocas “bombitas Rodríguez” que quedaban sobre la mesa cotizaban más que el oro y se disputaban a punta de lanza. No así la gaseosa. El mate hacía su ronda castrense, y se pitaba de lo lindo. El cumpa Luis se refería a la importancia de la formación de cuadros, y volvía al tema de la educación. “Creo que, con vistas a 2011, Néstor Kirchner quiere avanzar en la agenda de cambios. Hoy, para hacer acciones hay que pasar por asambleas, hay que explicar, hay mucho, mucho cuadro. Nosotros tenemos un instituto de formación y capacitación que dirige el Dr. Lapolla. Yo veo que hay mucha cosa mezclada. Hoy hay mucho cuadro, mucha clase media militando en los pobreríos. En la mesa nacional del FTV son 60 tipos, de los cuales el 60% es universitario. Mi vicepresidente es arquitecto. Surge la militancia en los barrios, y de buena calidad, y lo importante es que no son tipos que vienen de la estratósfera: son emergentes barriales. La diferencia del FTV con el resto de las organizaciones es que nosotros somos anteriores a la crisis, somos del 97. Entonces, hay mucho cuadro territorial consolidado.” Surge, entonces, la importancia de la formación de cuadros. D’Elía destaca que asistimos a un momento en el que todas las organizaciones tienen absoluta conciencia respecto de la necesidad de capacitar. “Están todos capacitando. De todos modos, creo que un dirigente social no sale de un curso, sino de la reflexión de una práctica. Por lo pronto, hay que hacer mucho ejercicio y mucha reflexión.”

“Hay que alejar a la Universidad de la derrota neoliberal”
El interrogante se traslada al plano de la educación. En principio, la universitaria, conformada por una clase garca que continúa aportando al modelo neoliberal desde los claustros privados. “Lo peor es que en Ciencias Económicas de la UBA siguen enseñando el modelo neoliberal como la tabla de salvación. Sé que Adriana Puigross está armando un nuevo proyecto de Ley Universitaria. Hay que avanzar sobre los contenidos de la diversidad, me parece que hay que alejar a la universidad de la derrota neoliberal, lo cual es complicado, porque los claustros siguen en manos de ellos, al menos en los lugares claves. Creo que hay que ligar mucho más a la universidad con el desarrollo científico-técnico local. Cuando estuve en Irán, me sorprendió cómo ellos son una especie de Paraguay del siglo XIX, que es lo que no les perdona el imperio. Fabrican desde una cucharita hasta la bomba atómica, todo ahí. La universidad es la base del conocimiento, y es la planificación del desarrollo de todo el país.” Cabría preguntarse, entonces, si los argentinos no hemos definido un proyecto de Nación. “Sí, lamentablemente, el proyecto de nación que está aún vigente es el neoliberal.”

En ese punto, nos preguntamos qué pasa cuando el profesional sale de la Universidad, ¿qué devolución tiene para con la sociedad? “Me parece que el problema es que es el país el que debe planificar una devolución. Cuando vos ves médicos cubanos trabajando en todo el mundo, comprobás que eso es tener una visión del porqué y el para qué de la universidad. Y después, hay que asegurar el ingreso a la universidad de las clases populares. Yo hoy veo muchos problemas en la base del sistema educativo. Nosotros reaccionamos contra el positivismo pedagógico, nos transformamos en trabajadores de la educación, en detrimento del compromiso con la profesión, y esto hay que decirlo aunque cueste. En la provincia de Buenos Aires, hace dos años llegamos a tener de 170 mil cargos, prácticamente 35 mil licencias mensuales. Eso es un descompromiso total con la profesión. Vos vas a El Tambo y la guardería está impecable, todo brilla, labura la gente del barrio; en la sala, lo mismo. Vas a la escuela y está hecha mierda. Ves que la relación comunidad-escuela, la relación de la escuela con los pobres, es terrible, ¡pero terrible! Ahí hay un choque de clase. Cuando yo era docente escuchaba cómo otros docentes despreciaban a los pibes, una cosa terrible. El compromiso social es distinto allí. Pero también hay otro tema: en la era de Internet, los pibes se embolan en la escuela. Por ejemplo, mi hijo menor es una cabeza brillante, pero en la escuela se aburre mal. Hoy vas la villa más villa y el cíber está hasta la maceta. Entonces cabe plantearse si sirve este sistema de la maestra expositora, etcétera. ¿Tenemos que seguir con el pico y la pala o ha llegado el momento de ponerle a cada pibe una computadora, laburar en red y demás? Hay que encontrar equilibrio, no es fácil, tiene su complejidad..."

El debate de la CTA
“De Petris dice que se acabó, que vamos de nuevo del territorio a la fábrica. No estoy de acuerdo. En el marco de la precariedad, la temporalidad ¿quién se va a organizar en el ámbito laboral? Nadie, si el mes que viene te vas. Es una pelotudez, pero tiene que ver con le debate CTA.” Mientras paladea una “bombita rodríguez”, Luis dispara: “Les voy a contar algo, porque me banqué 12 años de mi vida discutiendo ahí todos los martes hasta que dije ‘basta’. Primero, la idea original de la fundación de la CTA, en un momento de fuerte desprestigio del sindicalismo, no era mala. Cada trabajador, un voto; y el concepto de central de trabajadores por encima del concepto de central de sindicatos. Un modelo nuevo en el mundo. Yo diría que los compañeros de Lula son los únicos que han intentado, en la CUT, hacer algo así. Así, se acercan a lo territorial, que tiene una dinámica que los sindicatos de trabajadores formales no tienen, una vertiginosidad y un grado de iniciativa muy fuertes. Entonces ellos (la CTA) se asustan, porque en realidad, pretenden que las organizaciones territoriales sociales sean sus ‘muchachos del bombo’. Ellos ponen la plata, pagan los micros, pero la agenda política la pone la CTA. Y a la hora de socializar el poder político, vos siempre sos un apéndice. Es una especie de vandorismo de izquierda (risas). Porque en realidad, terminan poniendo la plata los grandes sindicatos y adueñándose. Ellos la única vez que le vieron la cara Dios fue cuando los movimientos sociales jugamos ahí. Pero cuando la mayoría nos corrimos, ¿que les quedó? Un par de grupos muy testimoniales. Fijate que el día que nosotros hicimos la marcha de la Central de Movimientos Populares (CMP), en realidad fue un duro golpe para la CTA, y eso fue algo que nadie registró. "

La organización de la CMP en Latinoamérica
“Los primeros en armar la CMP son los brasileros. Yo estuve en el congreso de ellos el año pasado, y ahí me plantearon armar la CMP en la Argentina. Ahora, en octubre nos estaremos juntando en Nicaragua todas las orgas de masa del continente para discutir el armado de la CMP en cada uno de los países. Los suecos nos están dando una mano en la logística. Queremos hacer una movida fuerte en ese sentido, porque creo que los sujetos más dinámicos de la clase somos los movimientos sociales.La CTA está muy para atrás.” La CTA, o “Central Testimonial Argentina” para Los Caniches de Perón, le acaba de hacer un paro al Gobierno a 25 días de las elecciones, habla de redistribución y vota contra la 125; apoya el 82% móvil de las jubilaciones pero observa el articulado de la ley; les cuenta las rayas a las cebras, a ver cuántas son las blancas y cuántas las negras… “Yo le pregunto a De Genaro, ¿los trabajadores rusos, en octubre del 1917, estaban a favor o en contra de la revolución? ¿los trabajadores peronistas, de qué lado estaban el 17 de octubre? De Genaro cree que éste es un gobierno entreguista. Se mete muchísimo con el caballito del INDEC. Si uno lee políticamente lo que está haciendo el INDEC, es correcto. El Gobierno le plantea a los gremios: 'planchemos el INDEC y discutamos salarios, no les regalemos números a los gringos'.”

El “caretaje” de centroizquierda

“¿Para quien trabaja Lozano?”, se pregunta D’Elía, y se responde: “Para él”. “Yo un día me inflé las pelotas. En 2002, estábamos en una reunión en un colegio por la calle Paraguay, donde estaba la hermana Pelloni. Estaba todo el caretaje de la centroizquierda argentina, que es un estilo de hacer política que yo detesto. Si un tipo viene a mí y se me vende como impoluto, yo me pongo al lado del botón. Me vuelve loco un tipo así. En esa reunión entraron todos a venderse como la reserva moral de la Nación. Entonces me paré y les dije: ‘Muchachos, yo me voy a retirar, porque yo no soy una buena persona, soy un tipo con errores, me equivoco mucho más de lo que acierto; a veces tengo miedo, meto la pata, no soy del todo leal… soy nada más que un ser humano, con lo cual no puedo estar acá en el olimpo de los semidioses’. Me paré y me fui a la mierda. Iba por el pasillo y me llama Marta Pelloni, me abraza y me dice: ‘La verdad, tenés razón’. Es así loco.”

CONTINUARÁ